Las empresas chinas Huawei y ZTE vuelven a ser el centro de atención. Desde 2010, cuando el Gobierno de Estados Unidos comenzó a investigar a ZTE por sospechas de acuerdos comerciales con Irán y Corea del Norte, estas compañías no han dejado de estar bajo escrutinio. En 2017, la Administración de Donald Trump impuso a ZTE una sanción monumental de 1.200 millones de dólares debido a que sus productos contenían componentes estadounidenses.
Un Torbellino de Acusaciones y Sanciones
La saga de Huawei y ZTE apenas comenzaba. En febrero de 2018, el Gobierno de EE.UU. acusó a ambas empresas de que sus productos no eran seguros para el público estadounidense, alegando posibles vínculos con el Gobierno chino. Esto provocó alarma no solo en EE.UU., sino también en Europa y Australia. Las sanciones estadounidenses y de algunos de sus aliados continúan, y ahora, la mayor potencia económica europea, Alemania, se prepara para tomar medidas drásticas contra Huawei y ZTE.
Alemania Planea Excluir Componentes Chinos de su Red 5G en 2026
Esta medida es muy seria. El Gobierno alemán está considerando eliminar los componentes críticos de origen chino de su infraestructura 5G para el año 2026. La mayoría de estos componentes han sido fabricados por Huawei y ZTE, lo que vuelve a poner a estas dos empresas chinas en el centro de atención. La propuesta de bloqueo, impulsada por el Ministerio del Interior, se basa en razones de seguridad nacional.
Aunque los Ministerios de Asuntos Exteriores y Economía han apoyado esta iniciativa, el Ministerio de Transportes e Infraestructuras Digitales no lo ha hecho. Según Bloomberg, este último ministerio ha declarado que la industria alemana se opone a la medida debido al impacto que tendría en su negocio. Sin embargo, un portavoz del Ministerio de Transportes asegura que no están bloqueando la iniciativa.
Revisión de la Infraestructura de Telefonía Móvil
Hasta ahora, el Gobierno alemán no ha emitido una declaración oficial. Los Ministerios de Asuntos Exteriores y Economía tampoco han oficializado nada, y Huawei y ZTE no se han pronunciado al respecto. Sin embargo, un portavoz del Ministerio del Interior ha confirmado que la infraestructura de telefonía móvil de Alemania está siendo revisada, lo que respalda la credibilidad de la información de Bloomberg.
Si esta iniciativa se aprueba, es previsible que lo haga, las empresas de telecomunicaciones alemanas deberán eliminar todos los componentes fabricados por ZTE y Huawei de sus redes de telefonía antes del 1 de enero de 2026. Además, tendrán que reducir su dependencia estructural de componentes chinos antes de 2029. En el actual clima de tensión entre China, EE.UU. y Europa, es probable que otros países europeos sigan el ejemplo de Alemania.
No tardaremos en ver cómo evoluciona esta situación y si otros países adoptan medidas similares.