Durante la actual administración, los estamentos de seguridad han logrado una significativa incautación de drogas, totalizando 589 toneladas decomisadas en más de mil 900 operaciones. Esta cifra representa un aumento considerable en comparación con las tres administraciones previas, donde se confiscaron 515 toneladas de sustancias ilícitas, según informaron las autoridades pertinentes.
El ministro de Seguridad Pública, Juan Manuel Pino, resaltó el fortalecimiento de la estrategia de Panamá contra los grupos dedicados al narcotráfico durante el último quinquenio, lo que ha resultado en «cifras récord» en términos de incautaciones.
Pino detalló que, en los años 2021 y 2022, se superaron las 128 toneladas de drogas incautadas, mientras que en 2023 se confiscaron más de 120 toneladas adicionales. Estos números ilustran el compromiso continuo del país en la lucha contra el tráfico de drogas y el crimen organizado.
El ministro explicó además que el narcotráfico tiene un impacto significativo en las organizaciones criminales que operan en la región, especialmente en lo que respecta a la cadena logística. Estas organizaciones, en colaboración con grupos pandilleriles, establecen rutas de tráfico ilícito tanto por mar como por tierra, principalmente desde Colombia. Esta actividad ilícita no solo alimenta el narcotráfico, sino que también contribuye al aumento de la violencia debido a disputas territoriales entre grupos rivales.
Además de las operaciones contra el narcotráfico a gran escala, las fuerzas de seguridad, en colaboración con el Ministerio Público, han llevado a cabo más de 10,761 operaciones destinadas a combatir el microtráfico durante este quinquenio. Estas operaciones han resultado en la detención de 16,386 personas involucradas en actividades relacionadas con el tráfico de drogas a pequeña escala, lo que demuestra el compromiso continuo del país en abordar todos los aspectos del problema de las drogas ilícitas.
