Las distinguidas instituciones académicas de Harvard y el Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT) han lanzado una advertencia este día lunes dirigida a los estudiantes que se manifiestan en favor de Palestina en sus campus, amenazando con desalojarlos y/o suspenderlos.
Estas manifestaciones, que comenzaron hace tres semanas en la Universidad de Columbia en Nueva York, y que han llevado a la detención de miles de estudiantes en todo el país, ahora están impactando en el cierre del año académico universitario, afectando las ceremonias de graduación.
El MIT ha dado un ultimátum a los estudiantes que protestan en su campus, instándolos a desmantelar el campamento antes de las 14:30 hora local (18:30 GMT), una orden que algunos estudiantes optaron por no seguir.
La presidenta del MIT, Sally Kornbluth, ha advertido que aquellos que no abandonen el campamento enfrentarán una «suspensión académica temporal inmediata», lo que les impedirá asistir a clases, realizar exámenes o participar en la graduación.
En Harvard, su presidente interino, Alan Garber, también ha advertido a los estudiantes acampados sobre la posibilidad de la expulsión si no cesan la protesta, aunque no ha amenazado con recurrir a la policía, como han hecho otras universidades en el país.
«Los participantes en la acampada o aquellos que la perpetúen serán expulsados de la universidad», declaró Garber, añadiendo que no podrán realizar exámenes ni residir en el campus hasta nuevo aviso.
Este lunes por la mañana, la policía intervino en el campamento de la Universidad de California en San Diego, arrestando a 64 personas.
En la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA), la policía también detuvo a al menos 45 personas este lunes bajo sospecha de conspiración para cometer allanamiento de morada, y todas las clases presenciales fueron suspendidas y se impartieron en línea debido al resurgimiento de las protestas.
Estas detenciones se suman a las 243 ocurridas la semana pasada.
En un comunicado emitido por el Campamento de Solidaridad con Palestina (PSE) de la UCLA, miembros de la comunidad universitaria aseguraron que los detenidos este lunes no estaban participando en una manifestación cuando comenzaron los arrestos y denunciaron que, tras ser detenidos, fueron obligados a permanecer en el suelo durante más de cuatro horas.
«La comunidad de UCLA exige la liberación inmediata de todos los detenidos esta mañana y la retirada de todos los cargos, tanto los inventados hoy como los ilegales del 1 de mayo», afirma el documento.
Con estas nuevas detenciones, ya son más de 2,700 los estudiantes arrestados en todo Estados Unidos desde que estallaron las protestas en abril contra la guerra en Gaza, el apoyo del gobierno de Joe Biden al de Benjamín Netanyahu y las inversiones de las universidades en la industria armamentística israelí.
En Los Ángeles, en el Pomona College, un grupo de estudiantes ha levantado un campamento en el recinto donde se celebrará la ceremonia de graduación. Esto ocurre el mismo día en que la Universidad de Columbia, epicentro de las protestas estudiantiles, anunció la suspensión de su gran ceremonia de graduación, que estaba programada para el 15 de mayo.
La portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, lamentó la decisión de la universidad de Nueva York: «Es lamentable que un pequeño grupo de personas haya ido demasiado lejos y le haya costado a sus compañeros este importante evento».
La semana pasada, Biden se alineó con el discurso que ha tildado de violentas y antisemitas unas protestas que han sido mayormente pacíficas, pero que han sido estigmatizadas por gran parte del establishment político y mediático estadounidense.
