Tras el anuncio de que Estados Unidos limitará el número de asilos otorgados a migrantes que ingresen irregularmente, cientos de migrantes que esperaban cruzar en la frontera entre Juárez (Chihuahua) y El Paso (Texas), con temperaturas que rondaban los 40 grados Celsius, decidieron retirarse para evitar problemas.
De acuerdo con observaciones realizadas por EFE, el lunes cientos de migrantes se encontraban acampando junto al río Bravo, entre Ciudad Juárez y El Paso, realizando recorridos de hasta 10 kilómetros en busca de un lugar menos vigilado para ingresar a Estados Unidos. Sin embargo, el miércoles, cuando la nueva normativa entró en vigor, ya no se encontraba ninguno en la zona.
Activistas expresan que las medidas anunciadas por el presidente estadounidense, Joe Biden, provocarán una acumulación de migrantes en Juárez, saturando los albergues. Los migrantes que ya están en los refugios temen que estas medidas prolonguen los tiempos de espera para realizar el proceso migratorio por la vía oficial.
Un ejemplo es Cindy Jackeline Hernández, una hondureña que llegó a Juárez con sus dos hijos, de 6 y 16 años. Ella cree que ahora será más difícil y lento conseguir una cita para solicitar asilo a través de la aplicación oficial CBP One. “Se supone que al entregarse la gente, que eso es algo peligroso, que no se lo recomiendo a nadie, me imagino que ya toda esa gente va a empezar a aplicar por la CBP One y creo que van a ser más largas las esperas para nosotros que ya tenemos tiempo de estar esperando y que hemos venido haciendo el proceso poco a poco”, explicó Hernández.
Según Hernández, es mucho mejor utilizar la vía oficial para no arriesgarse a cruzar irregularmente, especialmente cuando se viaja con menores. “Estados Unidos de ahí no se va a ir y si nosotros hacemos las cosas ordenadas nos puede ir hasta mucho mejor, más que todo por nuestro proceso legal. Ya si entramos por la fuerza, un mes y medio y te van a echar para atrás porque no vas a alcanzar el asilo, te van a pedir demasiadas pruebas para poder aplicar a un asilo político”, indicó.
Además, lamentó que los movimientos políticos previos a la elección de este año en Estados Unidos estén influyendo en las políticas migratorias.
Rosa Mani Arias, coordinadora de Servicio al Migrante de la organización civil pro migrante Avara Juárez, expresó que ya estaban preparados para mayores restricciones desde Washington. “Creo que también debemos estar preparados mentalmente para recibir familias que vienen caminando 6-7 días desde Chihuahua capital. Que vienen y se encuentran con esto y finalmente la desesperación, la tristeza, se va apoderar de ellos”, comentó Arias.
Para Arias, las medidas ordenadas por Biden solo estimulan la llegada de menores no acompañados, ya que el anuncio de las autoridades estadounidenses no afecta a los menores de edad que viajan solos. “Solo pensar en niños no acompañados me eriza la piel. Eso no significa que alentemos a las personas que manden a sus hijos solos. Eso es otro llamado, no lo hagamos, hay experiencias desgarradoras, que esto no signifique: Ah como sí lo van a dejar pasar, enviémoslo desde Centroamérica solo porque sí lo van a dejar pasar”, advirtió la activista.
Estas declaraciones y observaciones se suman a la creciente preocupación por las nuevas políticas migratorias de Estados Unidos y su impacto en las comunidades migrantes en la frontera.