Corea del Norte anunció con orgullo el éxito de su más reciente prueba de misil táctico balístico, dotado con un novedoso sistema autónomo de navegación. Este importante hito, supervisado personalmente por el líder Kim Jong-un, marca un avance significativo en las capacidades militares del país.
La agencia norcoreana KCNA destacó que la prueba validó la fiabilidad y precisión del sistema de navegación autónomo, aunque no ofreció detalles específicos sobre el armamento probado. Kim Jong-un expresó su gran satisfacción por el resultado, reconociendo el valor estratégico que representa este avance y elogiando a los grupos de trabajo de ciencia y tecnología de defensa por su contribución al proyecto.
El lanzamiento de varios proyectiles desde el área de Wonsan hacia el mar del Este, detectado por el Estado Mayor Conjunto surcoreano, marca el primer ejercicio de este tipo desde el pasado 2 de abril. En esa ocasión, Corea del Norte lanzó un proyectil de alcance intermedio que, según afirma el régimen, portaba una ojiva hipersónica.
El momento del test coincide con la crítica del régimen norcoreano hacia las tradicionales maniobras estivales conjuntas de Corea del Sur y Estados Unidos, las cuales calificaron como un «ejercicio de ataque nuclear». Este gesto desafiante se produce tras la reafirmación del apoyo de China y Rusia a Corea del Norte durante la reciente cumbre entre Xi Jinping y Vladímir Putin en Pekín.
Además, en una visita a un complejo industrial de defensa, Kim Jong-un enfatizó la necesidad de fortalecer la capacidad de disuasión nuclear en respuesta a los movimientos «de confrontación militar temeraria de los enemigos». Este mensaje subraya la determinación de Corea del Norte en medio de las crecientes tensiones geopolíticas en la región.
