Polémica por la Aprobación de un Acta
La sesión plenaria del lunes 22 de abril en la Asamblea Nacional de Panamá estuvo marcada por gritos, recesos y reclamos, en medio de la polémica sobre la aprobación del acta del martes 16 de abril, donde se discutió un proyecto de ley clave para la creación de un distrito y tres corregimientos en Bocas del Toro. La controversia se intensificó cuando el diputado independiente Juan Diego Vásquez solicitó la visualización del acta del jueves 18 de abril, dando inicio a una serie de reclamos sobre la transparencia del proceso legislativo.
La bancada independiente, liderada por Vásquez, expresó su preocupación por la falta de publicación de las actas de las últimas sesiones, incluyendo la del martes 16 de abril, que reviste especial importancia debido a su relación con el proyecto de ley en cuestión. Según el diputado Gabriel Silva, el presidente de la Asamblea, Jaime Vargas, habría cerrado la discusión sobre el proyecto sin anunciar que no se había alcanzado la mayoría requerida para su aprobación, lo que generó un ambiente de incertidumbre y descontento entre los legisladores independientes.
La situación se volvió aún más tensa cuando, durante la sesión del lunes 22 de abril, Vargas anunció que el acta del martes 16 de abril había sido aprobada, a pesar de las objeciones de la bancada independiente. Esta afirmación provocó una serie de protestas y reclamos por parte de los diputados, quienes cuestionaron la legalidad del proceso y exigieron una revisión exhaustiva de las actas pendientes.
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El presidente de la Asamblea, en un intento por calmar los ánimos, atribuyó la falta de publicación de las actas a un «problema técnico», explicando que la Asamblea se encontraba en proceso de implementación de un nuevo sistema de transcripción de actas que había experimentado dificultades técnicas. Esta explicación no fue suficiente para disipar las dudas de los legisladores independientes, quienes consideraron inaceptable que se aprobara un acta sin haber sido debidamente revisada y discutida por el pleno.
El secretario general de la Asamblea, Quibián Panay, intervino para respaldar las palabras del presidente Vargas, asegurando que se estaban realizando esfuerzos para solucionar los problemas técnicos y garantizar la transparencia en el proceso legislativo. Sin embargo, los diputados independientes insistieron en la necesidad de esclarecer la situación y exigieron que se respetara el debido proceso en la discusión del proyecto de ley en cuestión.
La controversia en torno a la aprobación del acta del martes 16 de abril adquiere mayor relevancia en el contexto político actual, ya que el proyecto de ley en discusión tiene implicaciones significativas para la configuración geográfica y política de Bocas del Toro. Con las elecciones programadas para el 5 de mayo, donde 60 de los 71 diputados buscan la reelección, el debate sobre este proyecto de ley se ha convertido en un tema central en la campaña política, especialmente para Benicio Robinson, presidente del Partido Revolucionario Democrático (PRD) y autor de la propuesta.
Robinson, cuyo feudo político se encuentra en Bocas del Toro, ha sido uno de los principales impulsores de la descentralización paralela en la región, obteniendo fondos significativos para su desarrollo. La asignación selectiva de estos fondos ha generado críticas y sospechas sobre posibles motivaciones políticas detrás de la propuesta de creación del nuevo distrito y corregimientos en la provincia.
En medio de las tensiones y controversias en la Asamblea Nacional, la discusión sobre el proyecto de ley 1138 continuará en los próximos días, mientras los diputados buscan llegar a un acuerdo que respete los principios democráticos y garantice la representación justa de los intereses de la población de Bocas del Toro. La transparencia y la legalidad del proceso legislativo se han convertido en temas de vital importancia, tanto para los legisladores como para la ciudadanía en general, quienes esperan que se resuelvan las discrepancias de manera justa y equitativa.
