Escalada de Tensión en Medio Oriente
En la mañana del viernes, hora local, Israel llevó a cabo un ataque limitado contra objetivos en Irán, según reportaron medios de comunicación y autoridades de Estados Unidos. Funcionarios estadounidenses informaron a la cadena CBS, socia de la BBC, que un misil israelí impactó en territorio iraní. Sin embargo, las autoridades iraníes negaron que se hubiera producido un ataque con misiles, afirmando que solo hubo un intento fallido de usar cuadricópteros (drones) que fueron derribados.
El gobierno israelí no ha comentado sobre el incidente, pero según el ministro italiano de Asuntos Exteriores, Antonio Tajani, Washington habría sido informado de la decisión de Israel de llevar a cabo el ataque en el último momento. Hasta el momento, no se han reportado víctimas, heridos ni daños significativos por parte de las autoridades iraníes, lo que sugiere que el ataque fue limitado para evitar una escalada del conflicto entre ambos países.
Según información confirmada por funcionarios israelíes y iraníes al diario The New York Times, el ataque tuvo como objetivo una base militar cerca de la ciudad de Isfahán, donde se escucharon tres fuertes explosiones, aunque no se han reportado daños graves. Este incidente ocurre menos de una semana después de que Irán lanzara más de 300 drones y misiles contra Israel, en respuesta al bombardeo del consulado iraní en Damasco el pasado 1 de abril.
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Isfahán, una provincia clave en Irán, alberga una importante base aérea, así como instalaciones nucleares y militares de importancia estratégica. Expertos como el exsubsecretario de Estado de EE.UU., Mark Kimmitt, sugieren que Israel podría haber elegido Isfahán como objetivo debido a su relevancia en el programa nuclear iraní y su capacidad para el desarrollo de armas nucleares en el futuro.
La elección de Isfahán como blanco también ha sido interpretada como un mensaje simbólico por parte de Israel, dada la asociación de la provincia con las instalaciones nucleares de Irán. Hamish de Bretton-Gordon, experto en armas químicas, señala que el ataque podría ser una demostración de la capacidad de Israel para atacar instalaciones sensibles en Irán.
A pesar de la negación de las autoridades iraníes sobre cualquier ataque con misiles, se han reportado medidas de defensa activadas en varias provincias del país, incluida la activación de sistemas de defensa antiaérea y la suspensión de vuelos sobre ciertas ciudades.
El presidente de Irán, Ebrahim Raisi, había advertido previamente que Israel enfrentaría una respuesta «masiva y dura» ante cualquier invasión, lo que sugiere que la situación en la región podría escalar aún más si continúan los ataques y las represalias.
En cuanto a la posible participación de Estados Unidos en el ataque, el secretario de Estado, Antony Blinken, ha confirmado parcialmente que no hubo participación militar estadounidense en ninguna acción ofensiva. Sin embargo, se ha evitado aclarar si Washington fue informado previamente sobre el ataque israelí.
Este incidente ha generado llamados a la contención por parte de varios actores internacionales, incluidos China, Egipto y Turquía, mientras que Omán, que actúa como mediador en la crisis del Medio Oriente, ha condenado el ataque.
En cuanto al futuro de la situación en la región, el corresponsal de seguridad de la BBC, Frank Gardner, señala que si este ataque representa el principio y el final de la respuesta de Israel, parece ser limitado en tamaño y alcance. Sin embargo, el desarrollo futuro dependerá de si Israel continúa con sus acciones y de la posible respuesta de Irán. La incertidumbre persiste sobre si este incidente marca el fin de la escalada de tensiones o si podría desencadenar más confrontaciones en el Medio Oriente.
