Empresarios exigen la eliminación de restricciones a la energía solar y la simplificación de los permisos para la instalación de paneles
La energía solar emerge como un pilar fundamental en la transición hacia fuentes de energía más limpias y sostenibles. Sin embargo, en Panamá, se enfrenta a obstáculos regulatorios y burocráticos que limitan su expansión y desarrollo. La Cámara Panameña de Energía Solar ha reiterado su firme rechazo a las restricciones impuestas a la generación de energía para autoconsumo, establecidas en un 3%, y ha instado a la eliminación de estas barreras para facilitar la instalación de tecnología solar en el país.
La imposición de topes a la generación de energía renovable para autoconsumo ha generado una controversia persistente en el sector energético panameño. Aunque la Autoridad Nacional de los Servicios Públicos (ASEP) ha tomado la medida transitoria de elevar estos límites del 2% al 3%, los empresarios del rubro de energía solar, así como algunos generadores, expresan su preocupación ante la posibilidad de que tales restricciones obstaculicen el crecimiento y la diversificación de las fuentes energéticas disponibles en el país.
En un comunicado oficial, la Cámara Panameña de Energía Solar ha enfatizado la importancia de promover el uso responsable de la energía solar como una herramienta indispensable para satisfacer las necesidades energéticas del país y reducir los costos asociados con el suministro de electricidad. Además, destacan su papel clave en la lucha contra el cambio climático, al facilitar la transición hacia un modelo energético más sostenible y respetuoso con el medio ambiente.
(Lee Ultimas: Donan al Minsa un nuevo software).
El gremio empresarial sostiene que uno de los pasos cruciales para impulsar el desarrollo de la energía solar en Panamá es la eliminación inmediata de los topes a la energía solar distribuida. Además, hacen hincapié en la necesidad de agilizar el proceso de obtención de permisos para la instalación de paneles solares, que actualmente enfrenta demoras significativas y obstáculos burocráticos que dificultan su implementación.
Entre las principales preocupaciones de los empresarios del sector se encuentra la excesiva duración de los trámites y la aprobación de permisos, que en la práctica pueden extenderse más allá de los plazos establecidos por la normativa vigente. A pesar de que la ley estipula un tiempo máximo de 30 días para la tramitación de estos permisos, numerosos casos evidencian que el proceso puede prolongarse entre 60 y 90 días, lo cual representa un obstáculo significativo para la adopción generalizada de la energía solar en hogares y empresas.
Además de las demoras en la obtención de permisos, los empresarios señalan otros desafíos, como la competencia desleal y las trabas injustificadas en los trámites administrativos. En muchos casos, la falta de disponibilidad de infraestructura adecuada, como transformadores y problemas en la red eléctrica, contribuye a retrasar la instalación de sistemas solares fotovoltaicos.
Para impulsar la penetración de la energía solar y reducir los costos asociados con la electricidad, es fundamental que la estrategia energética de Panamá involucre de manera activa y decisiva a todos los actores relevantes, incluyendo consumidores, técnicos, científicos, profesionales, trabajadores y empresas del sector privado.
Procedimientos para la instalación de paneles solares
En Panamá, más de 60 empresas especializadas ofrecen servicios de instalación de sistemas solares fotovoltaicos para residencias y locales comerciales. Asimismo, una decena de bancos locales ofrecen planes de financiamiento con tasas preferenciales para facilitar la adquisición de equipos solares.
Los trámites necesarios para la instalación de paneles solares incluyen varios pasos que deben ser completados de manera adecuada y en cumplimiento con la normativa vigente:
- Consulta con profesionales del sector: Antes de iniciar el proceso de instalación, se recomienda consultar con expertos del sector para obtener asesoramiento sobre la mejor opción para el hogar o local, así como para asegurarse de cumplir con todos los requisitos legales y técnicos establecidos por las autoridades competentes.
- Aprobación de planos por las autoridades municipales y el Cuerpo de Bomberos: Los planos para la instalación de paneles solares deben ser aprobados por las autoridades municipales correspondientes, así como por el Cuerpo de Bomberos de Panamá, que evalúa la seguridad y el diseño de los equipos. Este proceso puede representar aproximadamente el 40% del valor total de la instalación y es necesario para garantizar el cumplimiento de las normativas de seguridad.
- Costo de trámites y permisos: Se debe considerar el costo asociado con la tramitación de permisos, que puede variar dependiendo de la ubicación y la magnitud del proyecto. Este costo suele incluir el pago de tasas administrativas y otros gastos relacionados con la obtención de autorizaciones por parte de las autoridades competentes.
- Aprobación e inspección por parte de la distribuidora de electricidad: Una vez que los planos han sido aprobados por las autoridades municipales y el Cuerpo de Bomberos, se procede a enviarlos a la distribuidora de electricidad correspondiente, como Naturgy o Ensa, para su aprobación e inspección del lugar de instalación. Esta etapa es crucial para garantizar el cumplimiento de las normativas técnicas y de seguridad establecidas por las empresas distribuidoras.
- Cambio de medidor regular por uno bidireccional: Finalmente, se solicita el cambio del medidor regular por uno bidireccional, necesario para medir tanto la energía generada por los paneles solares como la energía consumida de la red eléctrica. Las distribuidoras de energía, como Ensa y Naturgy, son responsables de realizar este cambio y de configurar el medidor bidireccional para registrar correctamente la cantidad de energía generada y consumida por el usuario.
La eliminación de las restricciones a la generación de energía solar y la simplificación de los trámites para la instalación de paneles solares son pasos fundamentales para promover el desarrollo sostenible del sector energético en Panamá. Al facilitar el acceso a la energía solar y reducir las barreras administrativas, el país puede avanzar hacia un modelo energético más eficiente
