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Detienen a mujer por brutal caso de maltrato infantil en la comarca Ngäbe Buglé

Un niño de 8 años víctima de atrocidades en Alto Galera

En un caso que ha conmocionado a la comarca Ngäbe Buglé, específicamente a la comunidad de Alto Galera, una mujer de 35 años ha sido arrestada por su presunta implicación en un cruel acto de maltrato infantil. La sospechosa fue capturada por funcionarios de la Fiscalía Superior de Asuntos Indígenas en colaboración con unidades de la Policía Nacional, tras una investigación exhaustiva que reveló detalles perturbadores sobre la situación del menor.

El niño, de tan solo 8 años, había sido confiado por su madre a su cuñada con la intención de evitarle largas caminatas hasta la escuela. Sin embargo, lo que parecía ser una medida para protegerlo resultó ser un terrible error. Las investigaciones preliminares revelaron que el pequeño presentaba quemaduras en gran parte de su cuerpo, presuntamente causadas por contacto con brasas y cucharas ardientes.

Además de las horribles quemaduras, se descubrió que el niño había sido sometido a un trato inhumano: estuvo encerrado y privado de alimentos durante varias semanas. Este abuso prolongado dejó secuelas devastadoras en el menor, quien sufre no solo quemaduras en varias partes de su cuerpo, sino también desgarros en el labio inferior y prácticamente la pérdida total de sus dientes, entre otros signos de maltrato.

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La noticia del arresto de la mujer ha generado indignación y consternación en la comunidad, que aún intenta comprender cómo pudo ocurrir tal atrocidad en su seno. Vecinos y autoridades locales han expresado su repudio ante este tipo de actos de crueldad, instando a una investigación exhaustiva y a que se haga justicia para el pequeño afectado.

Tras el descubrimiento de las terribles condiciones en las que vivía el niño, fue trasladado de urgencia al hospital regional de Veraguas, el Dr. Luis “Chicho” Fábrega, donde ha estado recibiendo atención médica especializada durante varias semanas. Los médicos y el personal del hospital están trabajando arduamente para tratar las heridas físicas y emocionales del niño, así como para brindarle el apoyo necesario en su proceso de recuperación.

Este caso ha puesto de manifiesto la importancia de la protección de los derechos de los niños y la necesidad de estar atentos a posibles señales de maltrato infantil en nuestras comunidades. Las autoridades están instando a cualquier persona que tenga información sobre casos similares a que la denuncie de inmediato, con el fin de prevenir futuros actos de violencia contra los más vulnerables de nuestra sociedad.

La detención de la mujer sospechosa es solo el primer paso en la búsqueda de justicia para el niño afectado y para enviar un mensaje claro de que el maltrato infantil no será tolerado bajo ninguna circunstancia. Se espera que el caso siga siendo investigado a fondo y que se tomen todas las medidas necesarias para garantizar la seguridad y el bienestar del menor y de otros niños en situación de riesgo en la comarca Ngäbe Buglé y en todo el país.

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