La creciente tendencia de amigos que se juntan para compartir la vejez en una vivienda comunitaria

Cohousing

En un rincón verde del interior de Sao Paulo, Brasil, un grupo de más de 25 personas, en su mayoría mayores, decidieron dar un giro a sus vidas. Su objetivo principal era escapar de la soledad, una preocupación común entre las personas que envejecen. «A medida que envejecemos, la tendencia es a estar más aislado», señala Norival de Oliveira, un economista de 60 años y uno de los responsables del proyecto, a Vinícius Lemos de BBC News Brasil. Con ese desafío en mente, se embarcaron en la creación de una comunidad basada en el concepto de cohousing, una práctica que ha ganado popularidad en todo el mundo como una alternativa para promover la convivencia y evitar la soledad en la vejez.

El cohousing es un estilo de vida comunitario en el que las personas tienen sus propias viviendas pero comparten espacios colectivos. Surgió en Dinamarca en la década de 1970 y se ha extendido a otras partes del mundo, atrayendo a grupos con afinidades diversas, desde personas mayores hasta familias jóvenes. En el Reino Unido y en España, por ejemplo, se han establecido comunidades de cohousing dirigidas específicamente a personas mayores, con el objetivo de fomentar la convivencia, la solidaridad y el cuidado mutuo.

En el caso de Brasil, Norival de Oliveira y su socio, el arquitecto Ricardo Pessoa, se inspiraron en este concepto para abordar la problemática de la soledad en la vejez. Después de conversar con amigos cercanos y encontrarse con ciertos obstáculos, decidieron abrir su proyecto, llamado Bem Viver (Buena Vida), al público en general. A través de redes sociales y el boca a boca, lograron atraer a personas interesadas en compartir este estilo de vida comunitario.

(Lee Ultimas: Los habitantes de Ibiza que viven en sus carros mientras los alquileres se disparan en la isla).

El proceso de selección para integrar la comunidad implicaba una interacción con los residentes existentes y requería la aprobación de estos para poder unirse al proyecto. Además, cada miembro debía contribuir con recursos económicos para adquirir su parte del terreno y financiar la construcción de su vivienda. Este aspecto financiero, aunque puede representar un desafío para algunos, se percibe como una inversión en una vejez más saludable y enriquecedora.

Después de una búsqueda exhaustiva, el grupo encontró un terreno ideal en Mogi das Cruzes, un municipio de Sao Paulo. El área, rodeada de naturaleza y con acceso a servicios esenciales, cumplía con los criterios establecidos por la comunidad. Con el terreno asegurado, se inició la fase de diseño arquitectónico, liderada por el arquitecto Roberto Kubota, quien compartía la visión de crear un espacio que promoviera la convivencia y el bienestar de los residentes.

El diseño de las viviendas y los espacios comunes se realizó teniendo en cuenta las necesidades de las personas mayores, con especial atención a la accesibilidad y la comodidad. Las casas, todas en una sola planta y de diseño compacto, estarían agrupadas cerca unas de otras para fomentar la interacción entre los residentes. Los espacios comunes, que incluyen una sala comedor, un salón para actividades artísticas, una piscina y huertas, están diseñados para promover la vida social y el cuidado mutuo.

A medida que el proyecto avanza y se acerca el inicio de la construcción, los futuros residentes están entusiasmados con la oportunidad de vivir en una comunidad que les brinde compañía y apoyo en su vejez. Para muchos, esta experiencia representa una forma de evitar la soledad que afecta a tantas personas mayores y de disfrutar de una vida más activa y enriquecedora. Como señala Marisa Fumanti, una de las futuras residentes, «es un nuevo modelo de vida que satisface muchas de las necesidades de las personas mayores, minimiza la depresión y proporciona ejercicio colectivo».

En un mundo donde la soledad en la vejez es un problema creciente, el cohousing emerge como una alternativa prometedora para promover el bienestar y la calidad de vida de las personas mayores. A través de la convivencia, la solidaridad y el cuidado mutuo, estas comunidades ofrecen un entorno enriquecedor donde los residentes pueden disfrutar de una vejez activa y conectada. Con la creación de proyectos como Bem Viver en Brasil, la tendencia del cohousing continúa ganando impulso y ofreciendo una respuesta innovadora a los desafíos del envejecimiento en la sociedad contemporánea